Este febrero, las series de los Guardianes de la Galaxia, la
Nueva Patrulla-X, Nova, Capitana Marvel y Cíclope se unirán en una misma gran
aventura para hacer frente a una amenaza cósmica que promete arrasar con todo
si se lo permiten los héroes reunidos.
El “Black Vortex” es un antiguo artefacto con un inconmensurable
poder y que resurgido en la galaxia con intenciones aún por conocer. Pero éste
portal permite que los usuarios que interactúen con el obtengan poderes, pero
no poderes cualquieras, sino cósmicos. ¿Os imagináis el poder que transformó a
Jean Grey en Fénix o a Norin Radd en Estela Plateada? Pues a causa de lo que
ocurra con el vórtice cualquiera podrá tener acceso a esos poderes cósmicos.
El autocontenido
crossover servirá para resituar el rincón galáctico de Marvel, además de añadir
un capítulo más de la Patrulla-X viajera temporal en el espacio. Sin duda, un
movimiento que organiza Marvel a sabiendas del gran reclamo que supone tener
siempre a los Hijos del Átomo a bordo de un crossover y más de estas
características.
Thane, el hijo de Thanos, reaparecerá junto con otros villanos a los que cada héroe se ha enfrentado en su propia cabecera y cómo siempre, prometen hacérselas pasar canutas a los héroes.
Algo me dice que veremos a cierto hermano Summers perdido…
En cualquier caso, lo autocontenido del crossover es lo que más me llama la
atención por el momento. Ya que salvo Guardianes de la Galaxia y La Nueva
Patrulla-X no sigo ninguna colección más y espero que Panini cuando edite el
crossover lo haga en dos grapa reuniendo todas las cabeceras o un bonito tomo…
¿Para qué quejarnos?
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